Tuesday, April 23, 2013

LA SCENE REX

Mi ausencia se os habrá hecho dura. He emprendido un viaje más allá de la cúpula de La Scene. Crls me dijo que me prestaba un mapa, porque llevaba días perdido. Imaginad mi mirada de desprecio y mi posterior sentimiento de duda al reconsiderar toda la distancia avanzada sin llegar a ningún lado. 

Cuando volví de este viaje, observé que nadie me reconocía y que mis mal llamados fans de mierda...

Perdón. "Hola puta agrupación de desagradecidos en busca de una luz que ilumine vuestra patética estancia en esto que llamamos Internet". 

... mis mal llamados fans de mierda estaban adorando a un becerro de oro. Mryom, aprovechando la fama que había acaparado como Scene Commenter (una profesión tan noble como gilipollesca) había tenido la osadía de abrir un blog en mi ausencia

-¿Otra puta que llega para darme el palo? –dije–

Nadie me reconocía, salvo Crls, que movió el rabo y murió. 

Así que desde éste mi púlpito reclamo toda la cyberatención que por NACIMIENTO Y DERECHO CONSTITUCIONAL MEREZCO. 

Sólo soy una persona. O un dios insecto. Yo qué sé. 

Abandonad el puto humor basado en abrefáciles, en coger el móvil borracho para acosar a vuestros exs (lo no-wave es llamar al que os ponga y sin motivo aparente, al escuchar su voz ansiosa, empezar a llamarle de puta para arriba), en que algo es gracioso porque estaba en la tele hace años, ... abandonad a los falsos dioses. 

En toda mi andadura lo que más me preocupó era que en el mundo habrá muchos imbéciles que cada jodida mañana de mierda le susurran a su cónyuge, todavía en el lecho, "¡BUENOS DíAS, PRINCESA!". Pensando en esos pobres imbéciles e imbécilas tenía que hacer altos en el camino.

Lo del viaje es una metáfora, no como lo de que Mryom vive en su cesto de la ropa sucia, que es verdad. En realidad pasé mucho tiempo encerrado en casa y se me empezó a ir la olla. Comencé a tener violentas fantasías sobre casarme con la Ballerina de las bayetas, una de mis únicas compañías en mi encierro.



El aire soviet de la ballerina me recuerda a todas esas rusas que me agregan a mi last.fm. Chicas descarriadas a las que espero poder comprar por correo cuando tengan la edad legal para follar rusa (los 14 años). Conocerán a su Comisario de la luz. Yo. 

Me escapé de mi autoencierro creativo para ir al concierto de las Mirroring. Esto qué fue... ¿Hace un mes... dos...? Me hice una foto con la morena que me tenía loquito y Crls nunca me la pasó. Es la de Grouper, enlacé a un disco suyo no hace tanto, buscadlo que está. A ella le da igual porque es anarquista y no cree en nada más que en la anarquía. El concierto calmó mi agitado espíritu unos cinco minutos, lo cual no está mal. En serio, he sufrido mucho. 

Para colmo, cuando volví del viaje por los infiernos, descubrí que una vez más, como cuando abandoné Alicante, como cuando abandoné Canadá, toda la puta música del iPod se había borrado. Vuelta a empezar. Casi lo había llenado, así que mejor dejarlo así. He decidido volver a mi vertiente más ruidosa y experimental. Y así nadie podrá volver a llamarme indie. Seré un no-waver, un noiser o algo así. Si tiene estribillo, es que eres gilipollas. Es el nuevo tatuaje de hombro a hombro con el que he vuelto de mi viaje. 

Por cierto, que Borderliness of Candyass (formerly Boards of Canada) andan ahora en un misterio a escala mundial en el que esconden álbumes por todo el mundo. Aquí los 20 segundos hallados en un vinilo y grabados como buen subnormaloide fan en puto vertical. LOS MEJORES 20 SEGUNDOS DE TU VIDA. Lo que sea por no sacar nuevo disco, vaya.

Quiero que sepáis que yo, cual Charlie, encontré uno de los álbumes secretos en una bolsa de Pelotazos y lo subí a mi Youtube. Yo al menos sé grabar en horizontal. Ahora creo que tengo derecho a conocer a los hermanos Marcus Eoin y Mike Sandison, ya os contaré si me mandan un whatsapp. Mola porque son hermanos pero tienen apellidos distintos. Sospecho que Eoin se lo ha puesto para dárselas de guay, mientras que Sandison, más maduro, ha sabido aguantar con su apellido pleb. 



Y esto me ha molado y quería ponerlo, a ver si me echan de Blogger. jeje. 

En fin, llega la parte de la música así que os podéis pirar los más imbéciles y quedaos sólo los fuertes. Como he dicho, lo experimental y de estructuras no convencionales es lo que más me pone, así que recomiendo este disco de Nocturnal Emissions: Spiritflesh. Guapo especialmente porque es de 1988 y todo tiene un toquecillo sucio y analógico. La verdad es que no deja de ser un poco de Sounday de la Casa Encendida, pero bueno, es la mierda que más me motiva. Y la verdad es que me sorprendió un poco que al empezar de nuevo la recolección musical este fuera de los pocos discos del siglo pasado. Ese y la banda sonora de Holocausto Caníbal, de Riz Ortolani. 

El tipo de Nocturnal Emissions se llama Nigel Ayers y ha ido echando a todo el mundo de su grupo, y luego metiendo a otros; el viejo sistema de becarios de toda la vida. Un genio. Lleva desde los 80 dando la brasa. Que si música concreta, noise, ambient, post-industrial... todo para hacer crítica a la sociedad de la información. En los 80. Flipa. Lleva sin sacar disco desde 2006. Como dos gilipollas escoceses que yo me sé. Pero imagino que la sobreinformación ha podido con Nigel, que ya peina canas. Un abrazo.

Yo esto lo englobaría en field recordings con electrohostias y búsqueda de ritmos extraños en el ruido. Bestial y poco sensible. En cualquier caso hipnótico y agradable, no molesto o intrusivo. 





2 comments:

AI said...

Como sigas publicitándome van a pensar que es hamor.

Von Snuff said...

Eres dead woman walking ahora mismo